De nuevo con vosotros mis fieles seguidores, fiel a nuestra cita y fiel a la verdad y a la justicia, a nuestra verdad y a una JUSTICIA que espero que algún día los responsables "oficiales", entiendan y puedan comprender que la Entidad Biológica de la Humanidad está siendo violada, engañada y sacrificada de forma sistemática por intereses económicos.
Somos muy pocos los que tenemos conciencia de la realidad de nuestra vida y podemos comprender que un ataque a las células que son nuestra entidad viviente es un atentado a nuestra vida. Pienso que una agresion tóxica como es la quimioterapia contra nuestras células y que suele acabar con nuestra vida puede ser alguna vez considerada por la justicia como una acción delictiva, cuando la sociedad entienda que no somos una ente viviente individual mecanizado, que nuestra entidad biológica real como "personas" son los 50 billones de células que con sus funciones hacen posible nuestra vida, que no somos una máquina bioquímica, somos el "continente" de una comunidad viviente compleja e interrelacionada que con su "trabajo" nos dan apariencia de persona o ente individual; no es posible que haya vida humana sin células vivas, sin ellas, seríamos como una "piel muerta" inanimada, fria e inerte como un "virus inmovil sin maquinaria a quien parasitar" sin el "aliento" energético vital y activo que le dan las células vivas.
Dicho esto podemos comprender con claridad que nuestra vida depende de las funciones celulares y que toda sustancia tóxica es veneno para las células -ver efectos secundarios de los fármacos- podemos ver que todas las acciones del "sistema" van contra nuestra vida, en todos los problemas de SALUD, hay sobrecarga tóxica de la Matriz extracelular, todas las prescripciones de medicamentos con pretensiones curativas contribuyen a la sobrecarga, la medicina oficial será efectiva cuando sus acciones vayan encaminadas a regularizar las funciones eliminando la sobrecarga tóxica
Somos muy pocos los que tenemos conciencia de la realidad de nuestra vida y podemos comprender que un ataque a las células que son nuestra entidad viviente es un atentado a nuestra vida. Pienso que una agresion tóxica como es la quimioterapia contra nuestras células y que suele acabar con nuestra vida puede ser alguna vez considerada por la justicia como una acción delictiva, cuando la sociedad entienda que no somos una ente viviente individual mecanizado, que nuestra entidad biológica real como "personas" son los 50 billones de células que con sus funciones hacen posible nuestra vida, que no somos una máquina bioquímica, somos el "continente" de una comunidad viviente compleja e interrelacionada que con su "trabajo" nos dan apariencia de persona o ente individual; no es posible que haya vida humana sin células vivas, sin ellas, seríamos como una "piel muerta" inanimada, fria e inerte como un "virus inmovil sin maquinaria a quien parasitar" sin el "aliento" energético vital y activo que le dan las células vivas.
Dicho esto podemos comprender con claridad que nuestra vida depende de las funciones celulares y que toda sustancia tóxica es veneno para las células -ver efectos secundarios de los fármacos- podemos ver que todas las acciones del "sistema" van contra nuestra vida, en todos los problemas de SALUD, hay sobrecarga tóxica de la Matriz extracelular, todas las prescripciones de medicamentos con pretensiones curativas contribuyen a la sobrecarga, la medicina oficial será efectiva cuando sus acciones vayan encaminadas a regularizar las funciones eliminando la sobrecarga tóxica
El manual de las enfermedades existe porque los organismos sobrecargados son afuncionales, los remedios agresivos/químicos/comerciales contribuyen de forma importante a la sobrecarga de funciones, tapan síntomas y conducen a la enfermedad crónica, que garantiza y perpetúa el consumo del "remedio", así se rentabiliza el sentido comercial del sistema, manteniendo una sociedad enferma a la que llaman con acierto PACIENTE. Tras un variable tiempo sin calidad de vida y de sufrimientos llega la muerte, este es nuestro destino diseñado. Este panorama es reversible, pero el FRENO es poderoso porque cuenta con el apoyo de una Humanidad cautiva y esclava de falsas creencias y el apoyo social de todos los poderes: mediáticos, políticos y judicial, obligándonos con leyes injustas basadas en creencias equivocadas.
Al exponer aquí el Informe Flexner a partir del cual la medicina oficial o convencional conquistó para ella a todos los poderes públicos y desde entonces dominante de la Sanidad Mundial, debo dejar claro, que yo solo acepto la medicina Hipocrática basada en el poder supremo de la Naturaleza que con su Sabiduría Universal otorga a todos los seres vivos la intuición, el instinto, la fuerza, la inteligencia y la capacidad de recuperar de manera autónoma la salud perdida.
Los cuidados de la salud basados en la observación y obediencia de las leyes biológicas de la Naturaleza es la medicina natural, principal y única, a partir de ella toda las demás son alternativas, en la que está incluida la derivada de Rockefeller y del informe Flexner hoy llamada oficial o convencional, que en mi opinión es la más agresiva y tóxica de todas ellas.
Aquellos políticos que acepten el Ministerio de Sanidad deben ser consciente de la gran responsabilidad que adquieren, hasta hoy, jurar el cargo ante el Jefe del Estado y poder figurar después como ministro del País, sin mas, sin el más mínimo conocimiento de la Entidad Viviente Humana, se me antoja un privilegio para las personas que se lo toman con cierta irresponsabilidad, parece que mas por figurar que por cumplir, que por su absoluta ignorancia no se tomen en serio tan grave problema, deben ser responsables absoluto de la Salud de los Ciudadanos y tener las ideas claras para establecer políticas preventivas, ¿vetadas?, que puedan poner freno a la mortalidad por cáncer, me refiero a esta enfermedad porque llevo casi un siglo preocupado por buscar una solución Bio-Reguladora de este problema que se está llevando en nuestro País una víctima cada CINCO MINUTOS. Los Ciudadanos deben ser educados con una idea clara de su autentica naturaleza; la frase frecuente desde las más absoluta ignorancia "yo me cuido", que cada cual lo hace según le parece, debe pasar a ser un conocimiento consciente mediante una educación clara y correcta que a la población que hay que cuidar es "la maquinaria celular", sin ellas, las células, no es posible la vida, células que están sufriendo un estilo de vida social por hábitos y costumbres que le están suponiendo un veneno mortal y no menos mortal un sistema sanitario que no tiene en cuenta y sigue ignorando que sin células sanas y vivas no es posible nuestra vida y las castiga por sistema con sustancias que por sus efectos adversos o secundarios son venenos para ellas. Mas de cien mil muertes por cáncer cada año en España, es un grave problema que está pidiendo justicia y que no debe ser afrontado por personas no preparadas que solo se preocupan de FIGURAR y presumir de un cargo que les viene MUY GRANDE.
El ayuno junto al Aire en ambientes abiertos, Sol, actividad física, ensaladas crudas, frutos y agua son suficientes para optimizar las funciones de nuestra Entidad Viviente Todas las sustancia que consumamos en exceso, agresivas o no, sobrecargarán las funciones del organismo, contaminarán el ambiente celular y serán responsables de la enfermedad y la muerte, además debemos cuidar no tener adición de sustancias químico/tóxicas ni hábitos tóxicos.
Ayuno: Dr. Karmelo Bizkarra
Comentario
Al exponer aquí el Informe Flexner a partir del cual la medicina oficial o convencional conquistó para ella a todos los poderes públicos y desde entonces dominante de la Sanidad Mundial, debo dejar claro, que yo solo acepto la medicina Hipocrática basada en el poder supremo de la Naturaleza que con su Sabiduría Universal otorga a todos los seres vivos la intuición, el instinto, la fuerza, la inteligencia y la capacidad de recuperar de manera autónoma la salud perdida.
Los cuidados de la salud basados en la observación y obediencia de las leyes biológicas de la Naturaleza es la medicina natural, principal y única, a partir de ella toda las demás son alternativas, en la que está incluida la derivada de Rockefeller y del informe Flexner hoy llamada oficial o convencional, que en mi opinión es la más agresiva y tóxica de todas ellas.
Aquellos políticos que acepten el Ministerio de Sanidad deben ser consciente de la gran responsabilidad que adquieren, hasta hoy, jurar el cargo ante el Jefe del Estado y poder figurar después como ministro del País, sin mas, sin el más mínimo conocimiento de la Entidad Viviente Humana, se me antoja un privilegio para las personas que se lo toman con cierta irresponsabilidad, parece que mas por figurar que por cumplir, que por su absoluta ignorancia no se tomen en serio tan grave problema, deben ser responsables absoluto de la Salud de los Ciudadanos y tener las ideas claras para establecer políticas preventivas, ¿vetadas?, que puedan poner freno a la mortalidad por cáncer, me refiero a esta enfermedad porque llevo casi un siglo preocupado por buscar una solución Bio-Reguladora de este problema que se está llevando en nuestro País una víctima cada CINCO MINUTOS. Los Ciudadanos deben ser educados con una idea clara de su autentica naturaleza; la frase frecuente desde las más absoluta ignorancia "yo me cuido", que cada cual lo hace según le parece, debe pasar a ser un conocimiento consciente mediante una educación clara y correcta que a la población que hay que cuidar es "la maquinaria celular", sin ellas, las células, no es posible la vida, células que están sufriendo un estilo de vida social por hábitos y costumbres que le están suponiendo un veneno mortal y no menos mortal un sistema sanitario que no tiene en cuenta y sigue ignorando que sin células sanas y vivas no es posible nuestra vida y las castiga por sistema con sustancias que por sus efectos adversos o secundarios son venenos para ellas. Mas de cien mil muertes por cáncer cada año en España, es un grave problema que está pidiendo justicia y que no debe ser afrontado por personas no preparadas que solo se preocupan de FIGURAR y presumir de un cargo que les viene MUY GRANDE.
El ayuno junto al Aire en ambientes abiertos, Sol, actividad física, ensaladas crudas, frutos y agua son suficientes para optimizar las funciones de nuestra Entidad Viviente Todas las sustancia que consumamos en exceso, agresivas o no, sobrecargarán las funciones del organismo, contaminarán el ambiente celular y serán responsables de la enfermedad y la muerte, además debemos cuidar no tener adición de sustancias químico/tóxicas ni hábitos tóxicos.
Ayuno: Dr. Karmelo Bizkarra
Citas de estre video:
Dr. Arturo O´byrne
La matrix extracelular. Terreno para la Bio-Regulación
Enlace
Bio-Regulación y Epigenética
enlace
La medicina actual es el mayor negocio después de la guerra
enlace
Homotoxicología
Dr. Arturo O´byrne
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La Sanidad mundial
"oficial o convencional"
Información obtenida de Internet: Rockefeller, Flexner, la OMS y la Sanidad Mundial
El Informe Flexner precursor de la industria farmacéutica y la causa de la tragedia de la Humanidad
La Sanidad mundial
"oficial o convencional"
Información obtenida de Internet: Rockefeller, Flexner, la OMS y la Sanidad Mundial
El Informe Flexner precursor de la industria farmacéutica y la causa de la tragedia de la Humanidad
El informe Flexner
Abrahan Flexner
Comentario
El hecho es que después de un siglo de imposición de un único canon terapéutico "legal", la homeopatía y otras medicinas alternativas no sólo no han retrocedido sino que su presencia es cada vez más importante, lo cual debería ser un motivo serio de reflexión, entendiendo siempre que desviarnos por otros "caminos" nos siguen alejando de la verdad, todas las que no tengan una base biológica, están lejos de ser realmente efectivas, por supuesto todas las alternativas olvidan también que el poder sanador es una propiedad exclusiva de la "materia" viva y que ninguna sustancia llámese convencional, natural y/u homeopática gozan de esa propiedad, que jamás serán efectivas cuando los organismos vivos han perdido por degeneración tóxica destructiva la propiedad de sanar, todas aprovechan el gran poder sanador de los organismos vivos para dar la idea y la sensación de que "ellas" son efectivas
Citas de Internet
http://www.taringa.net/posts/salud-bienestar/8952329/La-penetracion-del-capital-monopolista-en-la-medicina.html
Enlaces
http://es.scribd.com/doc/20189110/Biografia-Abraham-Flexner
http://en.wikipedia.org/wiki/Abraham_Flexner
http://www.historiadelamedicina.org/flexner.html
http://www.taringa.net/posts/salud-bienestar/8952329/La-penetracion-del-capital-monopolista-en-la-medicina.html
Enlace
http://www.forocomunista.com/t7386-la-penetracion-del-capital-monopolista-en-la-medicina
Citas
Los nuevos derroteros de la ciencia a comienzos del siglo XX quedan ilustrados por el informe Flexner, que dio un giro completo a la teoría y la práctica de la medicina en Estados Unidos y, a partir de allí, en el mundo entero. Abraham Flexner era un oscuro pedagogo cuando en 1908 la Fundación Carnegie le encargó un informe sobre la capacitación de los médicos en Estados Unidos y Canadá. El encargo le llegó por recomendación de su hermano mayor, Simon, que había sido uno de los pioneros en la creación de la Fundación Rockefeller, director del Instituto Rockefeller de Investigación Médica, además de patólogo en Johns Hopkins y en la Universidad de Pensilvania. En 1902 John D. Rockefeller había creado el General Education Board, la primera gran fundación educativa de Estados Unidos. Flexner entró a formar parte de su personal. Su tarea consistía en evaluar el estado de las universidades en norteamérica, y el de la educación médica en particular.
Flexner no tuvo necesidad de descubrir nada nuevo. Su informe es esencialmente el mismo que había elaborado la Asociación Médica Americana dos años antes y que nunca había podido publicar. En su tarea Flexner fue guiado por N.P. Colwell, miembro de la Asociación Médica Americana, quien quería asegurarse de que la investigación de Flexner llegaba a las conclusiones previstas. Incluso el pedagogo acabó la redacción de su informe en las oficinas centrales que la Asociación tenía en Chicago. La coalición de esa Asociación con Carnegie y Rockefeller llevó unas determinadas tesis sobre la práctica de la medicina a todo el mundo. Flexner puso una rúbrica para alcanzar una gloria imperecera en materia de enseñanza de la medicina.
A partir de entonces la medicina dejó de ser un conjunto de prácticas para convertirse en una única práctica, en un canon homogéneo. En lo sucesivo el paciente ya no pudo volver a elegir médico porque los médicos eran clones unos de otros: como los remedios, los médicos también se fabricaban en serie y la medicina se acaba codificando en protocolos de actuación, diagnósticos, definiciones y vademécums compilados en gruesos volúmenes. El canon llegó impuesto por el dictado de una Asociación Médica Americana que ni tenía carácter oficial, ni tampoco representaba al conjunto de la profesión. Por ejemplo, ni las mujeres ni los negros podían formar parte de ella. Lo que en 1910 iniciaron la Asociación Médica Americana, Flexner, Rockefeller y Carnegie, acabó momificado en la Organización Mundial de la Salud. Lo que empieza de manera sectaria acaba también de la misma manera.
Con su informe Flexner se limitó a dar forma intelectual al desembarco del capital monopolista en la medicina y la farmacopea norteamericana, a la creación de la industria de la salud, un nuevo sector industrial emergente al que debían someterse los médicos. El ejercicio de la medicina debía convertirse en un negocio, había que fomentar un mercado de la salud, algo que estaba muy lejos en 1910, cuando ejercían más de 60.000 profesionales dispersos por un vasto territorio, uno de los porcentajes de profesionales por habitante más altos del mundo. Como consecuencia de ello, la atención sanitaria se acercaba al ideal: médicos por todas partes y precios asequibles de la atención sanitaria. Esa abundancia de médicos se debía a que no se necesitaba un permiso oficial del Estado para ejercer, de modo que cualquiera podía poner una consulta, y también a las facilidades de matriculación en las escuelas de medicina, que eran muchas y de propiedad privada.
Estados Unidos pasó de 166 escuelas de medicina en 1910 a sólo 77 en 1940. Fue un cierre selectivo que afectó a la mayoría de las pequeñas escuelas rurales; sólo permitieron la apertura de dos escuelas para negros. En 1963 Estados Unidos mantenía el mismo porcentaje de médicos por habitante que en 1910, a pesar de un incremento enorme de la demanda. De los 375.000 médicos en activo en 1977, sólo 6.300, el 1,7 por ciento, eran negros. El médico modificó su posición en la pirámide social; de un profesional muy cercano al paciente, se conviritió en parte integrante de una élite selecta cuyos honorarios muy pocos podían satisfacer, lo cual abrió un fantástico mercado secundario: el de los seguros médicos. Las relaciones entre ambas partes, médico y paciente, cambiaron radicalmente.
La nueva medicina acapara la exclusividad de su aplicación “científica”, que es única, de manera que a partir de entonces el Estado deberá intervenir como árbitro para sancionar esa unidad: cuál es la auténtica medicina y cuál se debe vilipendiar, quién es médico y quién es sólo un curandero, qué conocimientos médicos se deben impartir, cómo se deben impartir y en dónde se deben impartir. Ni cualquiera puede fundar una facultad de medicina, ni cualquiera puede ejercer la medicina. Para que alguien se pueda llamar médico primero debe disponer de un título académico que sólo el Estado puede otorgar; para que alguien pueda ejercer la medicina primero debe disponer de una autorización que sólo el Estado puede otorgar, todo lo cual va cuidadosamente reglamentado y supervisado, además, por corporaciones profesionales del tipo de la Asociación Médica Americana, al servicio de los intereses de grandes empresas capitalistas de la farmacia, del equipamiento médico, de los seguros médicos, etc. Naturalmente los herbolarios también desaparecieron o fueron marginados. La formación médica, como las demás enseñanzas codificadas, son un instrumento de dominio sobre la ciencia sancionado por el Estado, que le proporciona al mecanismo una apariencia de objetividad y neutralidad.
El médico debía ser un científico auténtico, obligado a estudiar varios cursos de conocimientos básicos antes de atender a sus pacientes. A partir del informe de Flexner los hospitales se vinculan a las facultades de medicina y a la investigación médica. No ha sucedido con ninguna otra profesión. Las facultades de derecho no comparten la misma sede que los tribunales, ni las escuelas de ingeniería están en los talleres, ni la enseñanza de la economía en la bolsa. Había que abandonar la medicina tradicional, el saber empírico y lo que Flexner calificaba como “dogmas históricos” que impiden la “libre búsqueda de la verdad”, que él personifica en la homeopatía, a la que dedica una buena parte de su informe porque el negocio de Rockefeller estaba ligado a las empresas farmacéuticas alopáticas.
En la industria farmacéutica, la dinastía Rockefeller comenzó con William Avery Rockefeller, quien acumuló su fortuna como charlatán mercachifle engañando a los incautos con medicamentos alopáticos fraudulentos, elixires compuestos por alcohol, cocaína y opiáceos que embotellaba como pócima milagrosa para cualquier clase imaginable de patología. Desde entonces la homeopatía no cesa de aglutinar en todo el mundo la furia inquisitorial de la auténtica medicina científica de Rockefeller, una campaña en la que logró sacudirse a una buena parte de la competencia. En 1910 la homeopatía era una práctica médica habitual y muy conocida especialmente en Estados Unidos. La primera asociación médica fundada en Estados Unidos había sido homeopática. Los homeópatas dominaban el mercado de la salud porque los médicos alópatas habían tenido tasas más altas de mortalidad en la epidemia de cólera de 1854.
La suerte de la homeopatía estaba echada en 1910 y no se trata de un caso aislado sino del arquetipo de la evolución científica en el siglo pasado. Uno de los principios de la homeopatía sostiene que no hay enfermedades sino enfermos, por lo que todo tratamiento debe ser personalizado, intransferible, lo que no encaja con un mercado capitalista de la salud dominado por la erradicación absoluta de la prevención en la medicina, las técnicas sofisticadas de diagnóstico, la producción en serie de fármacos, los protocolos uniformes que dirigen la prescripción médica y la venta indiscriminada de medicinas. El médico receta y el farmacéutico vende. Una de las áreas de negocio en medicina es la investigación, al final de cuyo proceso hay que registrar una patente y, finalmente, vender fármacos, cuantos más mejor.
En 1910, junto con otros conglomerados farmacéuticos, Rockefeller controlaba hospitales, universidades e investigación. La medicina y sus áreas afines se convirtieron en un modelo de control y regulación monopolista, bajo el cobertura oficial de la FDA (Food and Drug Administration), un departamento del gobierno de Estados Unidos que hoy dicta la política sanitaria y farmacéutica en el mundo entero. A su vez, el 75 por ciento del presupuesto de la FDA lo pagan las empresas farmacéuticas, es decir, que son éstas las que realmente controlan a un organismo aparentemente público, y no al revés. En cualquier caso, lo que concierne a la vida y a la salud es algo hoy extremadamente formalizado y minuciosamente regulado por criterios que, en ocasiones, son harto dudosos y poco tienen que ver con la ciencia. Los abigarrados protocolos de la FDA imponen lo que es una droga que hay que prohibir, lo que es un alimento que se puede ingerir y lo que es un fármaco que se debe prescribir. Dicen lo que es sano y lo que es pernicioso; lo que deben hacer y lo que no, tanto los médicos y pacientes como los gobiernos; lo que es salud y lo que es enfermedad, siempre basándose en criterios que sólo son realmente científicos si coinciden con los intereses económicos de las empresas farmacéuticas.
Citas:
http://www.elcorreogallego.es/?idMenu=5&idNoticia=292755
Una perspectiva mas amplia sobre el informe Flexner
enlace
http://www.unla.edu.ar/documentos/institutos/isco/cedops/libro2a20.pdf
La Sanidad mundial
enlace
http://fmacris1929.blogspot.com.es/2014/01/willian-avery-rockefeller-y-flexner.html
Flexner no tuvo necesidad de descubrir nada nuevo. Su informe es esencialmente el mismo que había elaborado la Asociación Médica Americana dos años antes y que nunca había podido publicar. En su tarea Flexner fue guiado por N.P. Colwell, miembro de la Asociación Médica Americana, quien quería asegurarse de que la investigación de Flexner llegaba a las conclusiones previstas. Incluso el pedagogo acabó la redacción de su informe en las oficinas centrales que la Asociación tenía en Chicago. La coalición de esa Asociación con Carnegie y Rockefeller llevó unas determinadas tesis sobre la práctica de la medicina a todo el mundo. Flexner puso una rúbrica para alcanzar una gloria imperecera en materia de enseñanza de la medicina.
A partir de entonces la medicina dejó de ser un conjunto de prácticas para convertirse en una única práctica, en un canon homogéneo. En lo sucesivo el paciente ya no pudo volver a elegir médico porque los médicos eran clones unos de otros: como los remedios, los médicos también se fabricaban en serie y la medicina se acaba codificando en protocolos de actuación, diagnósticos, definiciones y vademécums compilados en gruesos volúmenes. El canon llegó impuesto por el dictado de una Asociación Médica Americana que ni tenía carácter oficial, ni tampoco representaba al conjunto de la profesión. Por ejemplo, ni las mujeres ni los negros podían formar parte de ella. Lo que en 1910 iniciaron la Asociación Médica Americana, Flexner, Rockefeller y Carnegie, acabó momificado en la Organización Mundial de la Salud. Lo que empieza de manera sectaria acaba también de la misma manera.
Con su informe Flexner se limitó a dar forma intelectual al desembarco del capital monopolista en la medicina y la farmacopea norteamericana, a la creación de la industria de la salud, un nuevo sector industrial emergente al que debían someterse los médicos. El ejercicio de la medicina debía convertirse en un negocio, había que fomentar un mercado de la salud, algo que estaba muy lejos en 1910, cuando ejercían más de 60.000 profesionales dispersos por un vasto territorio, uno de los porcentajes de profesionales por habitante más altos del mundo. Como consecuencia de ello, la atención sanitaria se acercaba al ideal: médicos por todas partes y precios asequibles de la atención sanitaria. Esa abundancia de médicos se debía a que no se necesitaba un permiso oficial del Estado para ejercer, de modo que cualquiera podía poner una consulta, y también a las facilidades de matriculación en las escuelas de medicina, que eran muchas y de propiedad privada.
Estados Unidos pasó de 166 escuelas de medicina en 1910 a sólo 77 en 1940. Fue un cierre selectivo que afectó a la mayoría de las pequeñas escuelas rurales; sólo permitieron la apertura de dos escuelas para negros. En 1963 Estados Unidos mantenía el mismo porcentaje de médicos por habitante que en 1910, a pesar de un incremento enorme de la demanda. De los 375.000 médicos en activo en 1977, sólo 6.300, el 1,7 por ciento, eran negros. El médico modificó su posición en la pirámide social; de un profesional muy cercano al paciente, se conviritió en parte integrante de una élite selecta cuyos honorarios muy pocos podían satisfacer, lo cual abrió un fantástico mercado secundario: el de los seguros médicos. Las relaciones entre ambas partes, médico y paciente, cambiaron radicalmente.
La nueva medicina acapara la exclusividad de su aplicación “científica”, que es única, de manera que a partir de entonces el Estado deberá intervenir como árbitro para sancionar esa unidad: cuál es la auténtica medicina y cuál se debe vilipendiar, quién es médico y quién es sólo un curandero, qué conocimientos médicos se deben impartir, cómo se deben impartir y en dónde se deben impartir. Ni cualquiera puede fundar una facultad de medicina, ni cualquiera puede ejercer la medicina. Para que alguien se pueda llamar médico primero debe disponer de un título académico que sólo el Estado puede otorgar; para que alguien pueda ejercer la medicina primero debe disponer de una autorización que sólo el Estado puede otorgar, todo lo cual va cuidadosamente reglamentado y supervisado, además, por corporaciones profesionales del tipo de la Asociación Médica Americana, al servicio de los intereses de grandes empresas capitalistas de la farmacia, del equipamiento médico, de los seguros médicos, etc. Naturalmente los herbolarios también desaparecieron o fueron marginados. La formación médica, como las demás enseñanzas codificadas, son un instrumento de dominio sobre la ciencia sancionado por el Estado, que le proporciona al mecanismo una apariencia de objetividad y neutralidad.
El médico debía ser un científico auténtico, obligado a estudiar varios cursos de conocimientos básicos antes de atender a sus pacientes. A partir del informe de Flexner los hospitales se vinculan a las facultades de medicina y a la investigación médica. No ha sucedido con ninguna otra profesión. Las facultades de derecho no comparten la misma sede que los tribunales, ni las escuelas de ingeniería están en los talleres, ni la enseñanza de la economía en la bolsa. Había que abandonar la medicina tradicional, el saber empírico y lo que Flexner calificaba como “dogmas históricos” que impiden la “libre búsqueda de la verdad”, que él personifica en la homeopatía, a la que dedica una buena parte de su informe porque el negocio de Rockefeller estaba ligado a las empresas farmacéuticas alopáticas.
En la industria farmacéutica, la dinastía Rockefeller comenzó con William Avery Rockefeller, quien acumuló su fortuna como charlatán mercachifle engañando a los incautos con medicamentos alopáticos fraudulentos, elixires compuestos por alcohol, cocaína y opiáceos que embotellaba como pócima milagrosa para cualquier clase imaginable de patología. Desde entonces la homeopatía no cesa de aglutinar en todo el mundo la furia inquisitorial de la auténtica medicina científica de Rockefeller, una campaña en la que logró sacudirse a una buena parte de la competencia. En 1910 la homeopatía era una práctica médica habitual y muy conocida especialmente en Estados Unidos. La primera asociación médica fundada en Estados Unidos había sido homeopática. Los homeópatas dominaban el mercado de la salud porque los médicos alópatas habían tenido tasas más altas de mortalidad en la epidemia de cólera de 1854.
La suerte de la homeopatía estaba echada en 1910 y no se trata de un caso aislado sino del arquetipo de la evolución científica en el siglo pasado. Uno de los principios de la homeopatía sostiene que no hay enfermedades sino enfermos, por lo que todo tratamiento debe ser personalizado, intransferible, lo que no encaja con un mercado capitalista de la salud dominado por la erradicación absoluta de la prevención en la medicina, las técnicas sofisticadas de diagnóstico, la producción en serie de fármacos, los protocolos uniformes que dirigen la prescripción médica y la venta indiscriminada de medicinas. El médico receta y el farmacéutico vende. Una de las áreas de negocio en medicina es la investigación, al final de cuyo proceso hay que registrar una patente y, finalmente, vender fármacos, cuantos más mejor.
En 1910, junto con otros conglomerados farmacéuticos, Rockefeller controlaba hospitales, universidades e investigación. La medicina y sus áreas afines se convirtieron en un modelo de control y regulación monopolista, bajo el cobertura oficial de la FDA (Food and Drug Administration), un departamento del gobierno de Estados Unidos que hoy dicta la política sanitaria y farmacéutica en el mundo entero. A su vez, el 75 por ciento del presupuesto de la FDA lo pagan las empresas farmacéuticas, es decir, que son éstas las que realmente controlan a un organismo aparentemente público, y no al revés. En cualquier caso, lo que concierne a la vida y a la salud es algo hoy extremadamente formalizado y minuciosamente regulado por criterios que, en ocasiones, son harto dudosos y poco tienen que ver con la ciencia. Los abigarrados protocolos de la FDA imponen lo que es una droga que hay que prohibir, lo que es un alimento que se puede ingerir y lo que es un fármaco que se debe prescribir. Dicen lo que es sano y lo que es pernicioso; lo que deben hacer y lo que no, tanto los médicos y pacientes como los gobiernos; lo que es salud y lo que es enfermedad, siempre basándose en criterios que sólo son realmente científicos si coinciden con los intereses económicos de las empresas farmacéuticas.
Citas de enlaces de internet
Informe Flexner
Enlaces
Enlaces
http://www.unla.edu.ar/documentos/institutos/isco/cedops/libro2a20.pdf
http://www.movimientarios.com/Informe%20Flexner.html
http://investigacionydocencia-lmi.blogspot.com.es/2011/05/modelo-de-abraham-flexner.html
http://terapiaselectromagneticas.blogspot.com.es/2013/10/el-informe-flexner.html
El homicidio deliberado DEL SISTEMA DE SALUD DE AMÉRICA: EL INFORME FLEXNER Publicado por: FarSight3 [ Enviar E-Mail ] Fecha: Miércoles, 9-Sep-2009 18:56:14
http://www.rumormillnews.com/cgi-bin/archive.cgi?read=155331
http://lunaticoutpost.com/Topic-Flexner-Report-How-John-D-Rockefeller-used-the-AMA-to-take-over-Western-Medicine
http://www.movimientarios.com/Informe%20Flexner.html
http://investigacionydocencia-lmi.blogspot.com.es/2011/05/modelo-de-abraham-flexner.html
http://terapiaselectromagneticas.blogspot.com.es/2013/10/el-informe-flexner.html
El homicidio deliberado DEL SISTEMA DE SALUD DE AMÉRICA: EL INFORME FLEXNER Publicado por: FarSight3 [ Enviar E-Mail ] Fecha: Miércoles, 9-Sep-2009 18:56:14
http://www.rumormillnews.com/cgi-bin/archive.cgi?read=155331
http://lunaticoutpost.com/Topic-Flexner-Report-How-John-D-Rockefeller-used-the-AMA-to-take-over-Western-Medicine
Citas:
Doctor Arturo O´byrne
Enlace
http://www.elcorreogallego.es/?idMenu=5&idNoticia=292755
Una perspectiva mas amplia sobre el informe Flexner
enlace
http://www.unla.edu.ar/documentos/institutos/isco/cedops/libro2a20.pdf
La Sanidad mundial
enlace
http://fmacris1929.blogspot.com.es/2014/01/willian-avery-rockefeller-y-flexner.html
Francisco M. Acris (Paco Acris 1929)
Investigador Naturo Higienista
Investigador Naturo Higienista
Diplomado y Experto Universitario
Crecimiento Celular y Cáncer
Nutrición y Dietética I y II
fmacris1929@gmail.com
La Línea de la Concepción, 24 Enero 2014
España
Citas
http://es.scribd.com/doc/20189110/Biografia-Abraham-Flexner
http://en.wikipedia.org/wiki/Abraham_Flexner
http://www.historiadelamedicina.org/flexner.html
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3178858/
http://en.wikipedia.org/wiki/Abraham_Flexner#Flexner_Report
http://es.wikipedia.org/wiki/Fundaci%C3%B3n_Rockefeller
http://www.saidem.org.ar/docs/Textos/Pati%F1o%20JF.%20Flexner%20-flexnerismo.pdf
“…Hay que acabar con la cara angelical de la ciencia…” Jaques Leibowith Unidad de Virología e Inmunología
Hospital Raymond Poincard (Garches)
(La guerra contra el cáncer. La noche temática, Rtve2)
Un tupido y embaucador velo de intereses sin conciencia llamado "CIENCIA" le está ocultando la VERDAD A LA HUMANIDAD
oooOooo
http://en.wikipedia.org/wiki/Abraham_Flexner#Flexner_Report
http://es.wikipedia.org/wiki/Fundaci%C3%B3n_Rockefeller
http://www.saidem.org.ar/docs/Textos/Pati%F1o%20JF.%20Flexner%20-flexnerismo.pdf
“…Hay que acabar con la cara angelical de la ciencia…” Jaques Leibowith Unidad de Virología e Inmunología
Hospital Raymond Poincard (Garches)
(La guerra contra el cáncer. La noche temática, Rtve2)
Un tupido y embaucador velo de intereses sin conciencia llamado "CIENCIA" le está ocultando la VERDAD A LA HUMANIDAD
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